martes, 4 de noviembre de 2008

¿Educa o Ravensburger?

No conozco muchas marcas de puzzles, sólo las más famosas, como son, en primer lugar, Educa y Ravensburger, y después Castorland, Clementoni o Diset (puzzles infantiles). He hecho puzzles, tanto de Educa como de Ravensburger, y debo decir que me gusta bastante más la primera. Me parece que hoy en día, es la mejor marca de puzzles del mercado español (desconozco cuáles se comercializan en otros países) ya no sólo por la calidad del material de las piezas, sino también por su forma simple y fija en todos los puzzles, sean de la gama que sean. En cambio, las piezas de Ravensburger me parecen mucho más complejas, con formas extrañas, unas muy grandes y otras en miniatura, etc.

Un poco de historia

En 1883, Otto Maier Verlag, un joven librero, funda una editorial en la ciudad de Ravensburg, en Alemania. Hace ahora 125 años que existe esta empresa, cuyo objetivo fue desde un principio, cumplir una función pedagógica a través de sus productos, siendo el primero de estos un juego llamado “Viaje alrededor del mundo”. Actualmente, Ravensburger es una empresa internacional de artículos de marca y la mayor productora de puzzles de Europa. Tienen como lema que los puzzles son estimulantes y divertidos, fomentan la concentración tanto de niños como de adultos, ejercitan la mente, la paciencia, y son vistos como un reto que hay que cumplir, que acabar tarde o temprano.


Mediante un buen posicionamiento de su marca, esta empresa ha conseguido que un alto porcentaje de los europeos relacionen el triángulo azul con Ravensburger. Según afirman ellos en su página web: “La gente que piensa en puzzles, piensa en Ravensburger”.

Por otro lado, Educa Borras S.A. es una empresa mucho más joven, que nace en 2001 como resultado de la fusión de dos conocidísimas empresas catalanas de juegos y puzzles: Educa Sallent, fundada en 1967, y Borras Plana, en 1894. La unión entre ambas consolida la creación de una de las compañías más importantes de capital español dentro del sector de juguetes educativos. Como fabricantes independientes, Educa se dedicaba a la creación de puzzles y juegos educativos, y Borras fabricaba juegos de entretenimiento y familiares. Pero, una vez unidas y consolidadas como una única empresa, han logrado traspasar fronteras y situar sus productos en los primeros puestos tanto de mercados europeos como de Latinoamérica o Norteamérica. A la hora de nombrar características de sus puzzles, valoran la creatividad, la gran variedad, calidad del material, constante renovación, y seguridad.

En cuanto a los puzzles de esta marca, que es lo que nos interesa, es Puzzlepassion el nombre que le dan a esta línea de productos de la marca. Podemos consultar a través de http://www.puzzlepassion.com/ el amplio catálogo de puzzles que tiene Educa, así como diferentes colecciones, como la que nombraba hace días de Victoria Francés, precios, otros productos complementarios para puzzles, como son el pegamento o el “parking” para puzzles, donde se pueden guardar estos a medio hacer sin que se deshagan, etc.

lunes, 3 de noviembre de 2008

La isla de James Bond en 5000 piezas

Por raro que parezca, éste no es el puzzle que más me ha costado hacer, ni en el que he empleado más tiempo. Supongo que por las ganas de acabarlo y por lo que me gustaba la imagen de la fotografía. Se trata de la isla más grande de Tailandia, llamada Phuket, o también conocida como La Perla del Sur. Está situada en uno de los puntos turísticos del Océano índico, concretamente en el mar de Andaman.
Esta roca tan famosa se encuentra, para ser más exactos, al norte de Phuket, en el Parque Nacional de Phang Nga, donde es posible realizar excursiones diarias partiendo del muelle de Laem Sai. Hasta llegar a ella los turistas se pueden encontrar con paisajes increíbles, largas playas con formaciones rocosas consideradas las mejores del sudeste asiático, gran variedad de islotes, etc. En resumen, lo que conocemos como una selva tropical virgen.
Para terminar, este puzzle de 5000 piezas mide 107 x 157 cm y lo tengo colgado en una de las paredes de mi habitación. Cuando lo compré no conocía los orígenes de la imagen, pero desde que supe un poco mejor dónde se encontraba y que era posible realizar excursiones organizadas desde Taislandia hasta la isla no he dejado de pensar que, si es posible, algún día visitaré este lugar.